General Motors anunció que eliminará más de 1.700 puestos de trabajo en el sector manufacturero como reacción a los cambios en el mercado de vehículos eléctricos. “En respuesta a una adopción más lenta de vehículos eléctricos a corto plazo y a un entorno regulatorio en evolución, General Motors está realineando la capacidad de vehículos eléctricos”, dijo la compañía en un comunicado informado por CNBC. “A pesar de estos cambios, GM sigue comprometido con nuestra huella de fabricación en EE. UU. y creemos que nuestras inversiones y dedicación a operaciones flexibles harán que GM sea más resiliente y capaz de liderar el cambio”.
Los despidos se están produciendo principalmente en una planta de Michigan que fabrica vehículos eléctricos de GM y en una planta de celdas de baterías Ultium Cells en Ohio. La empresa también está despidiendo “temporalmente” a 700 personas en una planta de Ultium Cells en Tennessee.
Las cuestiones regulatorias en cuestión probablemente sean el reembolso de impuestos federales de $7,500 que se había otorgado anteriormente a las compras de vehículos eléctricos, que expiró a principios de este año bajo el “Big Beautiful Bill” que hizo las cosas mucho menos bonitas para muchos programas e industrias centrados en el medio ambiente. Pero GM también había dicho a principios de este mes que pondría fin a gran parte de su investigación y desarrollo de pilas de combustible de hidrógeno para centrarse más en las baterías, la tecnología de carga y los vehículos eléctricos, por lo que anunciar despidos en esas mismas áreas es una medida difícil.
