“Si bien la Comisión Europea declaró que las autoridades libias están investigando el incidente, semanas después del ataque, no hay indicios de que la cooperación, o asistencia técnica y financiera, haya sido suspendida durante el curso de esta investigación”, dice la carta.
Los firmantes, incluidos Amnistía Internacional, ActionAid, Sos Méditerranée, Emergency, Médecins sin Frontières, Mediterranea que salvan a los humanos y a los refugiados en Libia, argumentan que el asalto expone casi una década de política fallida de la UE.
“Ocho años de apoyo de la UE no han mejorado los registros de derechos humanos de estos actores, sino abusos habilitados y legitimados”, advirtieron, y agregaron que “las vidas humanas no deben ser ignoradas en nombre del control fronterizo”.
Las ONG acusan a la comisión de hacer la vista gorda “a pesar de la abrumadora evidencia” de las violaciones de los derechos humanos por parte de las autoridades libias; y de malhechruando sus propios programas Al negarse a mostrar al público los controles de seguridad que realiza para garantizar que los proyectos financiados por la UE no dañen a las personas.
Exigen que Bruselas restaure “el estado de derecho en su frontera marítima; suspender la cooperación con Libia sin más demora; Insta a Italia a finalizar su Memorando de Comprensión de 2017 con Libia; e insta a otros Estados miembros a abstenerse de acuerdos similares “.
La apelación aterriza como la agitación interna de Libia complica la diplomacia europea. El país permanece dividido entre los gobiernos rivales en Trípoli y Benghazi, respaldado por poderes rivales como Rusia y Turquía. Moscú ha ampliado su presencia con entregas de armas y planes para una base naval en Tobruk, mientras que Ankara ha llegado a los acuerdos marítimos que Grecia considera ilegal.