El mundo está trabajando arduamente para reducir las emisiones de carbono y alcanzar el objetivo de “Net Zero”. Los gobiernos, las empresas y las personas están enfocados en combatir el cambio climático. Al mismo tiempo, se considera que las fuentes de energía renovable, como la solar, eólica e hidroeléctrica, son el futuro. Pero a pesar de esto, el gas natural sigue siendo fuerte. ¿Cómo es esto posible? ¿Cómo puede sobrevivir el gas natural en un mundo centrado en reducir las fuentes de energía que generan carbono?
Vamos a explorar por qué el gas natural sigue siendo importante, incluso cuando apuntamos a Net Zero.
1. Un Puente hacia un Futuro Más Limpio
El gas natural se llama un “combustible puente” porque nos ayuda a pasar de los combustibles fósiles como el carbón y el petróleo a una energía más limpia. Es una opción mejor que el carbón y el petróleo, ya que el gas natural emite la mitad del CO2 del carbón y un tercio del petróleo. Para los países y las industrias que todavía usan combustibles fósiles, el gas natural ofrece una solución más limpia y a corto plazo.
Cambiar al gas natural puede reducir las emisiones y aún satisfacer las crecientes necesidades energéticas. A medida que la energía renovable crece, el gas natural ayuda a llenar los vacíos cuando la energía eólica o solar no está disponible.
2. Fiabilidad y Seguridad Energética
La energía renovable es prometedora, pero todavía enfrenta algunos desafíos. La energía solar y eólica dependen del clima, y almacenar energía extra para su uso posterior sigue siendo difícil. Aquí es donde entra el gas natural.
Las plantas de gas natural pueden generar electricidad rápidamente cuando el viento no sopla o el sol no brilla. Esto hace que el gas natural sea clave para la seguridad energética. Ayuda a garantizar que los países puedan satisfacer sus necesidades energéticas cuando la energía renovable no es suficiente. A medida que avanzamos hacia Net Zero, el gas natural ayuda a mantener estable la red eléctrica.
3. El Auge del Gas Natural Licuado (GNL)
El Gas Natural Licuado (GNL) ha cambiado el mercado energético. Permite que el gas natural se transporte a largas distancias, lo que facilita el comercio internacional. Ahora, los países pueden acceder a energía más limpia desde cualquier parte del mundo.
El GNL está ayudando a los países que no tienen su propio suministro de gas a obtener energía confiable. También está reemplazando al carbón en países como China e India. A medida que el GNL crece, podría desempeñar un papel importante en satisfacer las necesidades energéticas globales mientras reduce las emisiones.
4. Energía Asequible y Accesible
El gas natural no solo es más limpio que el carbón y el petróleo, sino que también es asequible y abundante. Hay grandes reservas de gas natural en lugares como Estados Unidos, Rusia, Medio Oriente y África. Esto significa que es probable que siga siendo una fuente de energía clave durante años, especialmente en países donde la infraestructura de energía renovable aún está en desarrollo.
Para los países en desarrollo, el gas natural es una forma asequible de proporcionar electricidad y apoyar el crecimiento. Aunque las energías renovables son el objetivo a largo plazo, el gas natural sigue siendo una opción práctica y rentable.
5. Captura y Almacenamiento de Carbono (CAC)
Una preocupación importante con el gas natural es su impacto ambiental, especialmente las emisiones de CO2. Pero nuevas tecnologías como la captura y almacenamiento de carbono (CAC) pueden ayudar. La CAC captura el CO2 de las plantas de gas natural y lo almacena bajo tierra, evitando que llegue a la atmósfera.
Muchas empresas y gobiernos están invirtiendo en la CAC. A medida que la tecnología mejora y se vuelve más barata, podría reducir el impacto ambiental del gas natural, convirtiéndolo en una mejor opción para los objetivos de Net Zero.
6. La Transición Energética es Compleja
La transición energética global no es tan simple como reemplazar los combustibles fósiles por energías renovables. Muchos países siguen dependiendo en gran medida del carbón, el petróleo y el gas. Cambiar a energía renovable lleva tiempo, dinero y planificación cuidadosa.
En lugares como Europa y Estados Unidos, el gas natural es una parte clave de la mezcla energética y seguirá siendo importante durante años. Los países en desarrollo, especialmente en África, enfrentan grandes desafíos energéticos. Para ellos, el gas natural puede ser la solución más rápida y práctica. Alejarse de él demasiado rápido podría poner en riesgo la seguridad energética donde las alternativas aún no están listas.
7. Gas Natural e Innovación
El gas natural no es solo una solución temporal: está evolucionando con nuevas tecnologías. La industria está adaptándose para cumplir con los objetivos ambientales. Nuevas tecnologías como los motores más limpios y la combinación de gas natural con energías renovables muestran que el gas natural puede cambiar para mejor.
Por ejemplo, los sistemas híbridos que usan tanto gas natural como energía renovable reducen las emisiones y aseguran que siempre haya suficiente energía disponible. Esta innovación muestra cómo el gas natural puede ayudarnos a alcanzar Net Zero al usar sus fortalezas y reducir su impacto ambiental.
El gas natural sigue siendo una parte importante de la mezcla energética global. Llena el vacío entre las necesidades energéticas actuales y un futuro más limpio. Es más limpio que el carbón y el petróleo y proporciona la fiabilidad y asequibilidad que necesitan las economías modernas. Aunque las energías renovables son el futuro, el gas natural seguirá siendo esencial durante años, especialmente a medida que tecnologías como la CAC sigan mejorando.