La campaña del Galatasaray en la Liga de Campeones sufrió otro obstáculo el martes por la noche, cayendo 1-0 en Mónaco después de una actuación valiente pero derrochadora que dejó a los gigantes turcos estancados en nueve puntos de cara a una recta final decisiva.
Mónaco tomó el control temprano en el Stade Louis II, pero Galatasaray aguantó la presión y fue perdiendo ritmo constantemente.
El equipo de Okan Buruk creó las mejores jugadas de la mitad: İlkay Gündoğan disparó desde corta distancia en el minuto 13 y Barış Alper Yılmaz estrelló el poste poco después, pero sus mejores momentos no produjeron recompensa.
En el otro extremo, Uğurcan Çakır impartió una clase magistral.
El portero del Galatasaray rechazó dos intentos de Maghnes Akliouche, desvió un disparo de Takumi Minamino y mantuvo la primera parte sin goles con una presencia imponente que frustró a los locales.
El Mónaco salió con más fuerza tras el descanso, pero Uğurcan se negó a ceder.
Primero salvó el disparo de Minamino que provocó una revisión del VAR, luego se lanzó con toda su longitud para detener el penalti de Denis Zakaria en el minuto 51, un momento que silenció brevemente a la afición local.
Minutos más tarde, rechazó dos veces a Folarin Balogun en situaciones de uno contra uno, manteniendo a flote al Galatasaray casi en solitario.
Pero la noche se desmoronó en el minuto 68, momentos después de que Uğurcan sucumbiera a una lesión en el muslo y fuera sustituido por Günay Güvenç.
En el siguiente córner del Mónaco, un balón revuelto cayó amablemente para Balogun, quien anotó el gol de la victoria superando al frío sustituto para poner al equipo francés arriba 1-0.
El Galatasaray presionó tarde pero nunca redescubrió su chispa en la primera mitad, terminando su segundo partido consecutivo de la Liga de Campeones sin marcar.
La derrota se produce tras la derrota en casa por 1-0 de la semana pasada ante el Union Saint-Gilloise y deja al equipo de Buruk sin goles consecutivos por primera vez en la competición esta temporada.
El viaje se ralentiza al final
La racha europea del Galatasaray había comenzado prometedora a pesar de una dura derrota por 5-1 en Frankfurt. Se recuperaron con una espectacular victoria por 1-0 sobre el Liverpool, una clara victoria por 3-1 sobre Bodo/Glimt y una dominante victoria por 3-0 ante el Ajax.
Pero las lesiones, las suspensiones y una banca cada vez más reducida han sofocado ese impulso. Con tres victorias y ahora tres derrotas, los campeones turcos se mantienen con nueve puntos – empatados con Mónaco – pero ahora necesitarán una actuación crucial en casa contra el Atlético de Madrid el próximo mes.
Mónaco, que anteriormente tenía un récord modesto de una victoria, tres empates y una derrota, subió a nueve puntos con su segunda victoria de la campaña.
Çakır brilla y luego se rompe
Uğurcan Çakır fue la estrella indiscutible.
Su dominio, sus reflejos y su parada de penalti mantuvieron vivo al Galatasaray mucho más allá del equilibrio del partido.
Pero su noche acabó dolorosamente en el minuto 59 tras chocar con Balogun.
Intentó continuar durante casi 10 minutos, pero finalmente hizo una señal al banquillo.
Buruk confirmó más tarde que es probable que el portero se pierda el próximo partido de liga de Antalyaspor.
“Intentó quedarse dentro, pero el músculo no se lo permitió”, dijo Buruk. “Estamos atravesando un ciclo difícil: lesiones por todos lados, y esta noche incluso nuestro portero cayó”.
La racha de Osimhen se rompió
La notable racha goleadora europea de Victor Osimhen (ocho partidos consecutivos desde la temporada pasada) se detuvo en Mónaco.
El delantero nigeriano trabajó incansablemente pero nunca encontró la oportunidad de ampliar su cuenta. Sigue con seis goles en la Liga de Campeones de este año y 12 en su racha de ocho partidos.
Mientras Mónaco celebraba la victoria, sus seguidores dejaron clara su frustración.
Enojados por el mal estado de forma nacional y las actuaciones inconsistentes en Europa, los fanáticos colgaron sus pancartas al revés y permanecieron en silencio durante los primeros 15 minutos, y solo encontraron la voz cuando el gol de Balogun golpeó la red.
“Deberíamos haber ganado”
En sus comentarios posteriores al partido, Okan Buruk expresó su decepción y confusión por cómo se acabó el partido.
“Parecía una noche en la que nos preguntábamos: ‘¿Cómo es que no vamos a ganar esto?’”, dijo. “La primera mitad fue todo lo que queríamos: dominio, oportunidades, compostura. Pero la segunda mitad se convirtió en un partido completamente diferente”.
Buruk dijo que las ausencias defensivas, las múltiples lesiones y una banca cada vez más reducida lo obligaron a tomar decisiones difíciles.
“Últimamente son los mismos jugadores todas las semanas”, añadió. “Nuestra profundidad se evaporó. Tenemos defensores suspendidos, jugadores lesionados y esta noche no teníamos opción defensiva en el banco. Es el período más difícil que he experimentado”.
Señaló los límites financieros del club y destacó las fuertes inversiones ya realizadas, incluida la transferencia de 75 millones de euros (87,3 millones de dólares) de Victor Osimhen.
Buruk confirmó que Osimhen, Wilfried Singo, Mario Lemina e Ismail Jakobs partirán para la Copa Africana de Naciones, lo que reducirá aún más el equipo antes de una carrera crucial.
“Nos reagruparemos y arreglaremos lo que podamos en la ventana de invierno”, dijo. “Por ahora pasamos página y nos centramos en el Atlético de Madrid”.






