El presidente Rodrigo Paz
El presidente de Bolivia, Rodrigo Paz, denunció que en su primera semana en el gobierno se detectaron casos de corrupción por unos 15.000 millones de dólares cometidos durante la anterior administración.
“Todavía estamos procesando la información y en su momento presentaremos denuncias puntuales, pero lo que hemos encontrado es una cloaca con más de 15.000 millones de dólares en corrupción. Nos han robado el futuro”, dijo el domingo en una rueda de prensa.
El mandatario mencionó como ejemplo la compra de radares para el control aéreo en la lucha contra el narcotráfico por 360 millones de euros “que no funcionan”.
Paz también acusó a su antecesor Luis Arce (2020-2025) de dejar sin recursos al Estado central. “Nos han dejado sin dinero”, sostuvo al evaluar su primera semana al frente del gobierno.
El centroderechista heredó una economía sumida en la peor crisis en 40 años con una aguda escasez de combustibles y una inflación acumulada hasta septiembre de 18,33% respecto de similar periodo del año anterior. En tanto, la cotización del dólar en el mercado paralelo más que duplicaba el cambio oficial.
Bolivia importa cerca del 60% de la nafta y casi el 90% del diésel que consume, lo que le demanda anualmente al Estado cerca de 3.000 millones de dólares, una de las mayores causas del déficit fiscal que bordea el 10% del Producto Bruto Interno (PBI), según informes oficiales.
Paz destacó que “se está normalizando la distribución de combustibles, el precio del dólar se estabiliza y el riesgo país está bajando” pero advirtió que “todavía nos falta reordenar la casa”.
Cabe recordar que el gobierno de Arce, que renunció a la reelección por su impopularidad, agotó sus reservas de dólares para mantener una agónica política de subsidios a los combustibles. Desde hace casi dos años, Bolivia sufre una escasez de dólares y combustibles que ha gatillado una inflación del 23% interanual a septiembre.
Paz se ha comprometido a ajustar los presupuestos de la nación y recortar más de la mitad de los multimillonarios gastos en subsidios de combustibles, aunque dice que los mantendrán para el transporte público y otros sectores críticos.



