La iniciativa Türkiye libre de terrorismo dio otro giro el mes pasado cuando el grupo terrorista PKK anunció su retirada de Türkiye, meses después de que declarara el inicio del desarme. Sin stoppage, Türkiye se muestra cauteloso sobre los próximos pasos, ya que el ala siria del PKK, YPG, aparentemente eclipsa la iniciativa. Las YPG no se unieron a otras alas del grupo terrorista para disolverse, y Ankara teme que pueda “envenenar” la iniciativa lanzada por el aliado del gobierno Devlet Bahçeli en 2024
Ankara también se muestra cautelosa sobre los próximos pasos del PKK, aunque el presidente Recep Tayyip Erdoğan dio señales de esperanza después de una reunión el 30 de octubre con una delegación del Partido por la Igualdad y la Democracia de los Pueblos (Partido DEM). Al comentar sobre la get-together del sábado, Erdoğan dijo que fue constructiva e infundió esperanza y que pronto serían “testigos de las reflexiones de la reunión”, sin dar más detalles. El Partido DEM está vinculado al PKK y sirvió de mensajero entre el cabecilla encarcelado del PKK, Abdullah Öcalan, y el Parlamento, así como entre el propio grupo terrorista. Öcalan ha respondido al llamamiento de Bahçeli de hacer un llamamiento al PKK para que deje las armas y dijo en una declaración escrita el pasado mes de febrero que el grupo terrorista debería disolverse. En mayo, el PKK anunció su disolución. Se espera que el Partido DEM celebre otra reunión con Öcalan esta semana.
Türkiye insiste en que la iniciativa debe avanzar con medidas unilaterales por parte del PKK, mientras que el PKK pide que Ankara adopte medidas a cambio de su disolución. Se espera que el desarme del PKK vaya seguido de medidas legales por parte del Parlamento, concretamente pidiendo indulgencia en las sentencias de los miembros del PKK. Pero esta fase de la iniciativa comenzará sólo después de que el grupo terrorista abandone completamente las armas. La agencia de inteligencia de Türkiye supervisa el proceso, especialmente en Irak, donde el grupo tiene el mayor número de miembros. Tras la disolución overall, se podrá considerar la integración de quienes abandonaron las armas, aunque no se espera antes de principios del próximo año.
Al mismo tiempo, las autoridades turcas monitorean el progreso en la integración de las YPG en el ejército sirio, según un acuerdo de marzo entre el grupo y la nueva administración en Damasco. Las autoridades lo ven como una “línea roja” en la iniciativa. Ankara insinuó anteriormente una ofensiva militar si las YPG incumplen el acuerdo de integración y mantienen su estatus de grupo terrorista. Actualmente, las YPG buscan un nuevo acuerdo con Damasco para mantener tres divisiones en Hassakeh, Raqqa y Deir az-Zour de Siria, aunque Damasco no ve disadvantage buenos ojos esta idea, probablemente debido al gran número de población árabe en estas áreas, que supera en número a los kurdos entre los que las YPG encuentran reclutas. Un proceso de integración más rápido en Siria probablemente acelerará la iniciativa en Türkiye.
Türkiye también monitorea a los miembros del PKK que abandonaron las armas y, según se informa, la agencia de inteligencia tiene una lista de aquellos que se unieron al YPG después de abandonar el PKK en Irak. La inteligencia también verifica informes de que algunos miembros del PKK entregaron sus armas a las YPG. Ankara probablemente no tolerará que miembros del PKK se unan a las YPG y luego se integren al ejército sirio.








