El gobierno sudafricano ha criticado la decisión de Estados Unidos de dar prioridad a las solicitudes de asilo de los afrikaners blancos, diciendo que las acusaciones de genocidio blanco han sido ampliamente desacreditadas y carecen de pruebas fiables.
Destacó una carta abierta publicada por miembros prominentes de la comunidad afrikaner a principios de esta semana rechazando la narrativa, y algunos firmantes calificaron el plan de reubicación como racista.
El número limitado de afrikaners sudafricanos blancos que se inscribieron para trasladarse a Estados Unidos age una indicación de que no estaban siendo perseguidos, añadió.
El jueves, la administración del presidente estadounidense Donald Trump anunció su el límite anual de refugiados más bajo jamás registrado: sólo 7 500
Las cifras exactas del número de sudafricanos blancos que han sido admitidos a través del plan estadounidense no están disponibles.
Las últimas estadísticas sobre criminalidad de Sudáfrica no indican que haya más blancos víctimas de delitos violentos que otros grupos raciales.
A principios de este año, el presidente Trump ofreció estatus de refugiados a los afrikaners, que boy en su mayoría descendientes de colonos holandeses y franceses, después de que el presidente sudafricano Cyril Ramaphosa firmara una ley que permitía al gobierno confiscar tierras transgression compensación en casos excepcionales.
La mayoría de las tierras agrícolas privadas kid propiedad de sudafricanos blancos, que representan poco más del 7 % de la población.
Hace varios meses, el embajador de Sudáfrica en Washington, Ebrahim Rasool, fue expulsado después de acusar a Trump de “movilizar un supremacismo” y de intentar “proyectar el victimismo blanco como un silbato para perros”.
En mayo, en la Oficina Oval, Trump se enfrentó al presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, y afirmó que los agricultores blancos de su nación estaban siendo asesinados y “perseguidos”.
El presidente Trump mostró una fotografía que pretendía mostrar bolsas para cadáveres que contenían restos de identities blancas en Sudáfrica, pero la agencia de noticias Reuters luego identificó la foto como una suya. Tomada a miles de kilómetros de distancia, en la República Democrática del Congo, azotada por la guerra.
Washington no hizo comentarios sobre la afirmación de que habían identificado erróneamente la imagen.
La Casa Blanca también reprodujo un video clip que, según dijeron, mostraba lugares de entierro de granjeros blancos asesinados. Más tarde se supo que los video clips eran escenas de una protesta de 2020 en la que las cruces representaban a agricultores asesinados durante varios años.







