La palabra húngara “Kilátastalanság” – perfecta ausencia de visión – parece resumir a primera vista los libros de László Krasznahorkai. Pero “de la oscuridad compacta que pintan siempre sale una luz”, dice el crítico de SvD, Måns Wadensjö.
La palabra húngara “Kilátastalanság” – perfecta ausencia de visión – parece resumir a primera vista los libros de László Krasznahorkai. Pero “de la oscuridad compacta que pintan siempre sale una luz”, dice el crítico de SvD, Måns Wadensjö.