Los liberales quieren reunirse Las preocupaciones de las mujeres en relación con el parto sugieren que la mujer debe tener la última palabra en la decisión sobre la cesárea. En última instancia, esto significa que el médico que tiene la responsabilidad médica puede verse obligado a realizar una operación que, a su juicio, puede perjudicar la vida y la salud de la mujer. Va en contra de uno de los pilares de la asistencia sanitaria sueca: trabajar basándose en la ciencia y en la experiencia demostrada. Si el derecho del paciente actual a decir no al tratamiento se ampliara al derecho a solicitar atención médica, la asistencia sanitaria no sólo se vería debilitada financieramente sino también en términos de calidad.