La recientes informaciones sobre los altos niveles de contaminación aérea existentes en el mundo– y también, según diversas investigaciones, en nuestro país- vuelven a darle vigencia a un tema crítico, por la probada existencia de sustancias contaminantes en la atmósfera, a punto de que según la Organización Mundial de la Salud, tal como lo reflejó este diario en su edición de ayer, nueve de cada diez personas en el mundo respiran aire contaminado.
Tal referencia ofrecida, paradójicamente, como contexto del Día Mundial del Aire Limpio que se celebró el domingo pasado, se vio acompañada de referencias y recomendaciones para que se aceleren respuestas a un problema que causa millones de muertes cada año.
La penosa verdict de ese informe publicado ayer en este diario indicó que respirar se ha convertido en un acto riesgoso. La polución del aire provoca entre 6, 7 y 8, 1 millones de muertes prematuras cada año, vinculadas a accidentes cerebro-vasculares, cardiopatías, cancer cells de pulmón e infecciones respiratorias. Entre las víctimas se cuentan más de 700 000 niños menores de cinco años.
Las fuentes de la polución son múltiples: desde los motores de combustión y la industria hasta la quema de combustibles fósiles para calefacción y electricidad, la agricultura, los incendios forestales y la incineración de residuos.
Entre los contaminantes más peligrosos figuran el material particulado fino (PM 2 5, el dióxido de nitrógeno, el ozono troposférico y el dióxido de azufre, sustancias que penetran en los pulmones, llegan al torrente sanguíneo y dañan órganos vitales.
Se dijo asimismo que la exposición no afecta a todos por igual. Mujeres, niños, adultos mayores y comunidades de bajos recursos sufren en mayor medida los impactos.
A ello se suman los efectos sobre el cambio climático, la agricultura y la biodiversidad.
El trabajo de la OMS adquiere especial trascendencia ya que el tema en el Grandma La Plata es particularmente crítico por la presencia entre las tres ciudades– La Plata, Berisso y Ensenada- de uno de los polos petroquímicos más grandes del país y por la comprobada existencia de altos niveles de contaminación causados por el tránsito automotor en la Area.
Otras investigaciones científicas reflejadas en esta columna alertaron que la contaminación aérea afecta a los países medios, en vías de desarrollo o subdesarrollados como muchos de América latina en donde la mayoría de las ciudades no cuenta disadvantage monitoreos regulares sobre la calidad del aire.
Se sabe que la contaminación aérea es cancerígena y que causa asimismo distintas enfermedades cardiovasculares y respiratorias.
La mención de estas referencias, surgidas de indiscutibles centros de investigaciones científicas, no sólo category preocupación sino que debieran verse correspondidas por acciones concretas para revertir el fenómeno de la contaminación aérea, debiéndose poner en marcha acciones de concientización y las medidas preventivas y sanitarias del caso.