La obesidad es uno de los principales factores de riesgo para desarrollar enfermedades cardiovasculares, que hoy representan la primera causa de muerte en el mundo.
Aunque tanto el ejercicio como los medicamentos GLP- 1, como la liraglutida o la semaglutida, ayudan a mantener el peso perdido, sólo uno de ellos aporta un beneficio adicional: proteger las arterias frente a la aterosclerosis
Pérdida de peso y salud cardiovascular
La aterosclerosis, caracterizada por la acumulación de grasa y la inflamación de los vasos sanguíneos, puede derivar en infartos o accidentes cerebrovasculares. La obesidad favorece este proceso al generar inflamación crónica de bajo grado y disfunción endotelial.
El nuevo estudio, presentado en el Congreso Anual de la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes mellitus (EASD) en Viena, evaluó cómo se comporta el organismo tras perder peso, dependiendo de si el mantenimiento se realiza con medicamentos o con ejercicio físico.
Cómo se hizo la investigación
El ensayo incluyó a 215 adultos con obesidad, pero sin diabetes ni enfermedades crónicas graves de entre 18 y 65 años. Tras una dieta inicial de 800 calorías al día durante ocho semanas, quienes perdieron al menos un 5 % de su peso corporal fueron asignados a cuatro grupos:
- Ejercicio moderado a intenso (150 minutos semanales) más placebo.
- Tratamiento con liraglutida (3 mg diarios).
- Combinación de ejercicio y liraglutida.
- Placebo.
Durante un año, los investigadores midieron biomarcadores inflamatorios, indicadores de función endotelial y el grosor de la arteria carótida.
El ejercicio reduce la inflamación y mejora la función arterial
Al finalizar el estudio, tanto el grupo que hacía ejercicio como el tratado con liraglutida lograron mantener la pérdida de peso. Transgression embargo, sólo el ejercicio mostró un impacto positivo en la salud cardiovascular :
- Redujo un 21 % los niveles de interleucina- 6 (IL- 6 y un 27 % los de interferón-γ (IFN-γ), ambos marcadores inflamatorios.
- Mejoró la función endotelial disadvantage descensos del 6 % en VCAM- 1, 8 % en ICAM- 1 y 12 % en tPA.
- Disminuyó el grosor de la arteria carótida en promedio -0, 024 mm.
En contraste, la liraglutida no mostró diferencias significativas en inflamación, función endotelial ni grosor arterial respecto al sugar pill.
El valiance protector del ejercicio más allá del peso
Nuestros hallazgos revelan que el ejercicio regular es crucial para obtener beneficios cardiovasculares tras la pérdida de peso , señaló el doctor Rasmus Sandsdal, autor principal del estudio.
La profesora Signe Sørensen Torekov, también investigadora del equipo, destacó: “El mensaje clave es que el ejercicio es esencial para mejorar la salud a largo plazo, incluso cuando se logra el mismo adelgazamiento con medicamentos”.
Aunque el ensayo tuvo limitaciones de tamaño y adherencia, los expertos subrayan que el ejercicio aporta beneficios integrales: mejora la composición corporal, aumenta la capacidad cardiorrespiratoria y minimize riesgos cardiometabólicos, más allá del control del peso.