El jefe del perro guardián nuclear de la ONU, Rafael Grossi le dijo a AFP el lunes que los esfuerzos diplomáticos para resolver la disputa Programa nuclear de Irán estaban en una “coyuntura difícil” pero el diálogo continuaría.
El Consejo de Seguridad de la ONU votó el viernes para reimponer las sanciones de la ONU que habían sido congeladas, después de que tres gobiernos europeos activaron el mecanismo “Snapback” en un acuerdo nuclear de una década que acusó a Irán de incumplimiento.
“Obviamente es una coyuntura bastante difícil. Es una situación muy difícil que nos enfrentamos en este momento”, el Agencia Internacional de Energía Atómica El jefe dijo, y agregó que las conversaciones entre las partes involucradas fueron planificadas en Nueva York para el lunes.
“Lo importante es que las comunicaciones continúan. Estamos planeando vernos si es posible hoy, lunes, aquí en Nueva York, y tal vez más reuniones durante la semana”.
La votación del viernes significa que las sanciones, que fueron suspendidas a cambio de bordillos en las actividades nucleares de Irán establecidas en el acuerdo de 2015, tendrán un efecto renovado el 28 de septiembre a menos que Irán pueda persuadir al consejo para que cediera en la próxima semana.
Teherán dijo que la acción de las potencias europeas, Gran Bretaña, Francia y Alemania, socavó meses de compromiso con el OIEA destinado a reanudar el monitoreo y garantizar el cumplimiento de las reglas internacionales.
A principios de este mes, Irán y el OIEA llegaron a un acuerdo en El Cairo que habría permitido que se reanuden las inspecciones de sitios nucleares iraníes.
Irán los había suspendido después de que Israel y Estados Unidos atacaron sus instalaciones nucleares en junio.
Los gobiernos occidentales han acusado durante mucho tiempo a Irán de buscar una capacidad de armas nucleares, una ambición que Teherán niega.
Teherán también ha criticado al OIEA por no condenar los ataques israelíes y estadounidenses.