A pocos días del combate más importante de su joven carrera, Álex Usieto visitó la redacción de DEPORTE en plena recta final hacia el 13 de diciembredonde disputará el Título internacional del CMB frente a Mario Fernández en el primer Fight Night de Noche de Leyendas. Con solo 19 añosun récord profesional de 6-0 con 5 KO y un crecimiento meteórico bajo el paraguas de Fight Lover, el catalán se ha convertido en una de las grandes joyas del muay thai español.
Usieto llega en su mejor forma física y mental, confiado en su estilo agresivo, en la potencia de sus calf kicks y en una preparación que define como la mejor de su carrera. En esta entrevista repasa su evolución, analiza a su rival, habla de su presente y desvela un futuro que apunta a grandes escenarios y, quizá, a las MMA.
El próximo 13 de diciembre disputas el título WBC Internacional en el primer Fight Night de Noche de Leyendas. ¿Cómo estás a nivel físico y mental?
Estoy muy contento, la verdad. Cojo esta pelea con muchas ganas, porque sé que me va a subir mucho en el ranking y me va a hacer bastante más conocido. Físicamente estoy a tope; creo que hasta ahora es, sin duda, la mejor preparación que he hecho. Y el 13 de diciembre lo voy a demostrar.
¿Qué sensaciones tienes con esta preparación? ¿Qué estás trabajando más?
Estoy practicando bastantes cosas nuevas muy chulas que creo que van a ir saliendo poco a poco. También le estoy metiendo bastante más intensidad a los entrenos, sobre todo a los paos y a todo al trabajo de cardio, porque quiero estar los cinco asaltos al 100%, si llega, que no creo.
Usieto posa en la redacción de SPORT / DEPORTE
Tienes 19 años, un récord profesional de 6-0 con 5 KO y muchos te ven como la gran promesa del muay thai en España. ¿Qué sientes cuando escuchas eso?
Hombre, siento alegría, porque yo empecé con 14 años siendo un niño y ver lo que estoy consiguiendo en tan poco tiempo me pone muy contento. Pero bueno, la gente solo me ve ahora en muay thai… quizá de aquí a unos años les doy un susto.
¿Te genera presión esa etiqueta de promesa y de ser más conocido que tus rivales?
Obviamente, la presión siempre está, pero yo creo que es algo bueno. Sí que sientes la presión por ser tú el más conocido, pero para mí eso es una ventaja, porque te obliga a prepararte más para los combates. Luego sales más preparado y más enfocado porque sabes que tienes que ganar.
Has peleado ya varias veces con Noche de Leyendas y Fight Lover. ¿Cómo ves esa relación con la promotora?
Mira, en este deporte no es como en el fútbol; es súper complicado conseguir algo, cualquier tipo de contrato o de oportunidad. Es un pasillo en el que al principio no ves la luz: no tienes manager, ni representante, ni nada, y no sabes cuándo vas a poder pelear a buen nivel. Hasta que aparecieron los de Fight Lover. Ahí yo vi la luz. Desde que estoy con ellos todo va viento en popa y muy bien, muy contento, 100%.

Usieto en el último NDL / ALEX USIETO
En el Olímpic de Badalona, en la segunda Noche de Leyendas, te enfrentaste al único rival que te había ganado en amateur… y lo noqueaste. ¿Te quitaste una espina?
Sí, sentía un poco la presión, porque pensaba: “si me vuelve a ganar, me va a dejar bastante humillado”. Pero realmente en amateur lo que pasó fue una pelea muy, muy cerrada, decisión dividida, se la podían haber dado a cualquiera. A mí en amateur no me iba bien perder, pero también me fue bien, porque no me preparaba ni de lejos como me preparo ahora, ni un 10% seguramente. Y perder me sirvió para decir: “vale, ahora subo a profesional y me voy a empezar a tomar las cosas en serio”. Y ya se ha demostrado que, si me lo tomo en serio, no era rival para mí.
“La gente no se imagina el dolor que puede causar esa patada hasta que la siente de verdad”
En Badalona saliste castigando la pierna desde el primer asalto. ¿Esa era la estrategia clara: destrozar la pierna con las calf kicks?
Sí, esa era la estrategia. Yo imaginaba que él se iba a preparar para pasarlas o esquivarlas, pero es muy complicado; es una patada muy difícil de parar y ahí se demostró. Yo ya veía que él iba a venir con el peso hacia delante e intentaría arrancarme la cabeza de una volea o algo loco, pero eso es muy complicado de hacer, porque yo controlo bastante bien la distancia. Cuando fui machacándole la pierna empecé a ver que le dolía y ya dije: “es obvio que va a caer”.
Para quien no lo haya vivido, ¿qué le pasa a un peleador cuando le trabajan tanto la zona del gemelo?
Pierdes tu estabilidad, pierdes todo. No puedes pivotar ni hacer nada. La gente está acostumbrada al low kick, que es una patada que se lleva dando muchos años. Yo descubrí la calf kick porque un luchador ganó por KO con esa patada, le pregunté, me la enseñó y empecé a interesarme. En esa parte de la pierna, al ser más fina, se cae mucho antes. Encima, el low kick la mayoría de luchadores lo tenemos ya muy endurecido, porque en mil combates nos han tirado la pierna; está acostumbrada. El gemelo no: nadie lo tiene endurecido. Es como si lo cogieras nuevo, entonces se puede romper mucho antes y duele muchísimo. La gente no se imagina el dolor que puede causar esa patada hasta que la siente de verdad.
Más allá de la técnica, da la sensación de que hay una violencia muy marcada en tu forma de pelear. ¿Siempre has tenido esa mentalidad?
Sí, yo siempre he sido una persona a la que le ha encantado la violencia, eso no es ningún secreto. Cuando me subo ahí, entiendo que esto es un deporte y todo, pero yo quiero hacerle daño a mi rival. Lo tengo delante y le quiero hacer daño de verdad. Y desde el primer momento que salgo, no me gusta estar paradito. Respeto a la gente que le gusta empezar más tranquilo, es una estrategia, subes el ritmo poco a poco… pero a mí me gusta empezar con todo. Soy muy hiperactivo, me gusta moverme mucho y no parar, no parar, no parar. Atabalar al rival hasta que caiga.

Usieto celebra su último triunfo / ALEX USIETO
¿Cómo descubres el muay thai y a qué edad empiezas a entrenar?
Desde muy pequeño me encantaban las artes marciales, pero mis padres no me querían apuntar porque decían que iba a ser un chico muy agresivo. Como vieron que no me iba bien en el cole ni en nada, dijeron: “vamos a intentar apuntarlo aquí, a ver si al menos canaliza su energía o hace algo bueno para él”. Y así fue. Me fue increíble: me enamoré del deporte desde el primer día, me enamoré del gimnasio. Empecé a ir todos los días sin fallar uno, nunca faltaba a los sparrings.
¿Cómo es tu día a día ahora mismo?
Me levanto, bajo a hacer el trabajo físico, y todos los días tengo una hora extra que no me toca por el campamento, pero la hago igual: suelo, jiu-jitsu, grappling, lo que sea. Luego voy a casa, como, me tomo la proteína, descanso un poco y bajo de nuevo: otras dos horas por la tarde entrenando. Cuando salgo, voy a dar clases en Sant Gervasi, en un gimnasio donde soy entrenador. Luego voy a casa, ceno y ya se ha acabado el día.
Vamos al 13 de diciembre. Te enfrentas a Mario Fernández por el título. A grandes rasgos, ¿qué dirías que son sus principales fortalezas?
Creo que la ventaja que tienen todos mis rivales últimamente es que son más grandes que yo, porque estoy peleando en un peso que realmente no es el mío. Me sacan más tamaño y se verá: en el combate él será más grande que yo. Pero eso no le da ventaja suficiente como para ganarme. Es un estilo muy diferente al mío. Él es un chico que va bastante paradito, pero lo hace muy bien: técnicamente es una pasada. Pero bueno, yo voy a subir ahí y ya sé lo que tengo que hacer y lo que voy a hacer para ganar.
¿Es el rival más duro que has tenido hasta ahora?
Creo que el más complicado fue el de junio, Aymar. Ese ha sido el más difícil sin duda. Mario es el segundo más complicado, pero Aymar era muy, muy complicado.
En tu opinión honesta, ¿cómo crees que se desarrollará el combate con Mario?
Creo que él cambiará un poco la estrategia y no saldrá tan paradito. Saldrá un poco más a meterme ritmo. Yo saldré exactamente igual que siempre: a meter ritmo desde el primer momento. Y cruzaremos palos hasta que uno de los dos caiga. Son cinco asaltos; no creo que llegue a la decisión, es muy complicado. No llevamos coderas, no llevamos ningún tipo de protección y vamos a matarnos los dos.
¿Ves más probable que se acabe antes del límite o contemplas una guerra larga a los puntos?
Siempre se puede alargar, depende de cómo vaya el combate, pero tiene toda la pinta de que se acabará antes.
En redes, él llegó a decir que iba a ser un combate de “Instagram contra la vida real”. ¿Qué opinas de ese comentario?
Bueno, ¿qué voy a opinar? Que todos los que han dicho eso hasta ahora no han acabado el combate. De momento es como que lo gafan: cuando dicen eso ya, pierden antes del tiempo. Yo, la verdad, lo he visto un rival bastante respetuoso; lo único fue ese comentario, que es el típico que siempre me hacen. Creo que lo dicen porque no saben moverse por redes sociales, no tienen esa suerte. Yo tampoco es que sea un experto, pero he aprendido bastante y sé lo mínimo para ir tirando. Como ellos no saben hacerlo, pues tienen un poco de envidia, por así decirlo, al ver que sé moverme en redes. Y siempre te critican con eso. Pero yo siempre les voy a animar a que lo hagan, porque eso va a hacer que el deporte crezca. Solo trae cosas buenas para el deporte.
Danos una predicción para el 13 de diciembre.
Lo que dice mi mente es que será como en junio: en el tercer asalto caerá. Es un rival duro, no creo que sea en el primero ni en el segundo, pero creo que en el tercero ya…
Mirando al futuro, ¿qué planes tienes?
En mi cabeza tengo llegar a lo más alto en el muay thai. Pero, como han hecho muchos luchadores, la idea es llegar a lo más alto en el striking y luego pasarse a las MMA con un nombre. Esa sería mi idea. Y luego llegar a las grandes ligas de MMA e intentar disputar todo lo que pueda ahí.
¿Cuál sería para ti la cima en muay thai?
ONE Championship, sin ningún tipo de duda. Es un objetivo que tengo en mente y ya estamos intentando planificar todo para llegar ahí. Me queda mucho aún, pero esa es la idea.
Ahora también estás entrenando suelo. ¿Cómo vive un peleador tan bueno en muay thai el hecho de empezar desde cero en jiu-jitsu y grappling?
Es cambiar el chip. Es como si empezaras de cero en otro deporte que no tiene absolutamente nada que ver. En realidad, no hay nada en común, salvo los barridos que haces en el clinch en el Thai. Lo demás es empezar de cero. Sabes que te toca pillar en todos los sparrings, que te toca volver a recibir por todos lados. Y poco a poco vas aprendiendo. Cuando te van saliendo cositas, ya te vas motivando. Estoy haciendo un trabajo bastante grande y creo que las cosas están saliendo bien abajo.
¿Tienes pensado irte a algún campamento fuera, como hace mucha gente que viaja a Tailandia?
Ya lo tengo hablado. No sé hasta qué punto puedo contar, pero está todo hablado con mis representantes y voy a ir a Tailandia a prepararme y a pelear por ahí también.
¿Crees que las MMA ofrecen una puerta más grande que el muay thai, aunque la disciplina esté creciendo?
Sí, no hay ninguna duda de que el muay thai está creciendo y está muy bien, pero las MMA tienen una puerta bastante más grande. Y aquí en España le debemos mucho a Topuria por eso, sin ningún tipo de duda.
Para cerrar: mándale un mensaje a tu rival, Mario, de cara al 13 de diciembre.
Mario, te respeto mucho, pero ya sabes que para conseguir ese cinturón tengo que pasar por encima tuyo. Y lo voy a hacer las veces que sea necesario, es lo que hay. Mucha suerte.






