Con una sensacional segunda parte, el Barça volvió a derrotar al Orlan Wisla Plock (30-24) y ya lo aventaja en cuatro puntos más el ‘goal average’ en la lucha por la segunda plaza del grupo, siempre a la estela de un Magdeburgo que lo ha ganado todo. Al igual Óscar Orellana con el baloncesto, ‘Tino’ Igropulo también ganó.
BAR
30
24
SIO
Alineaciones
| (12+18): Emil Nielsen (p.), Flaz Janc (1), Luis Frade (3), Dika Mem (2), Tim N’Guessan (5), Aleix Gómez (9, 7p.). Carlsbogard (1), Domen de Makuc (2), Antonio Bazán, Dani Fernández (3) y la Natación de Eldera. |
| (12+12): Tobias Bergerud (p.), Leon Susnja, Zoran Ilic (2), Przemislaw Krajewski (1), Mitja Janc, Melvyn Richardson (5, 1p.), Gergö Fazekas (4) -siete inicial-, Mirko Alilovic (ps), Sergei Mark Kosorotov (4), Dawid Dawydik (1), Zoltan Szita (2), Lovro Mihic (3), Kiryl Samoila, Miha Zarabec y Michal Daszek (2, 2p.). |
En los prolegómenos, Paco Blázquez (presidente de la RFEA) y su homólogo catalán Jaume Fort presidieron el homenaje a los primeros olímpicos del balonmano español (Múnich’72), con el emblemático Quico López Balcells, José Manuel Tauré, Faustino Villamarín, Santos Labaca, Jesús Guerrero y Juan Antonio Medina
El choque llegaba marcado por la exhibición azulgrana en Polonia (24-34) y por el enfrentamiento que derivó en un injusto partido de sanción para Carlos Ortega (no estuvo en el Palau y su ‘segundo’ Igropulo dirigió el partido) más una multa que también se llevó Xavi Sabaté. Por cierto, la afición del Wisla lo idolatra.

Homenaje a los primeros olímpicos del balonmano español / VALENTÍ ENRIQUECE
De inicio, los locales corrieron y se marcharon por 4-2 (min. 8:19), con tres tantos de Aleix Gómez. Sin embargo, ni las cuatro exclusiones (la de Susnja muy rigurosa) ni lassi era Emil Nielsen sacaron a los polacos del partido. El meta danés llevaba ocho de las ‘oficiales’ en el 20′.
El despertar del exazulgrana Melvyn Richardson tras su flojo partido en Plock acercó al Wisla (8-7), que atacó varias veces para empatar. No lo logró por un siete metros que detuvo Hallgrimsson al hijo del gran Jackson Richardson y el Barça se fue por tres goles (11-8, min. 22:27).
A partir de ahí se impuso el ‘centro’ defensivo visitante y entre Susnja, Zoran Ilic y Krajewski corrigieron el tema de las exclusiones y anularon el ataque estático azulgrana. Tanto, que el equipo recurrió a tiros sin superioridad desde los extremos e Ilic llevó al partido a las tablas en el descanso (12-12).

La defensa del Wisla, en acción ante Petar Cikusa / VALENTÍ ENRIQUECE
El aún ‘tocado’ Dika Mem llevaba un gol y N’Guessan, ninguno. La ‘Igropulina’ surtió efecto y el equipo regresó más activo en ataque, con algún ‘siete metros’ riguroso que aprovechó Aleix Gómez (siete de ocho llevaba). El caso es que el Barça recuperó el +3 (17-14) y Dani Fernández anotó el 18-14 (mín. 37:11).
Hallgrimsson negó otro penalti a Richardson y Sabaté paró el partido con 19-14, con el Palau vibrando tras un 7-2 en nueve minutos (20-14, min. 40). Aún no estaba el trabajo acabado. Richardson completó un rápido parcial de 0-3 (20-17) y los locales respondieron con un 6-1 tras otras cuatro paradas de Nielsen (15).
Con 24-18 en el 47′, Sabaté ordenó atacar con siete y el Wisla peleó hasta el final con un gran Fazekas, pero tres goles de N’Guessan sirvieron para abrochar otra gran victoria del mejor equipo de las secciones profesionales del Barça (30-24). Los cuartos de final están mucho más cerca.






