A Jagoba Arrasate se le acumulan los problemas. La lesión de Leo Román en los isquiotibiales, confirmada este viernesenciende todas las alarmas porque se perderácomo mínimo, los próximos dos partidos contra el Betis este domingo y la semana que viene contra el Getafe. Los dos guardametas suplentes, Lucas Bergström y Pichu Cuéllarllevan dos años con muy pocos minutos en sus piernas. El técnico de Berriatua medita ahora a quién darle la oportunidad en La Cartuja: a un cancerbero veterano curtido en mil batallas o a uno por hacer. Ambos, faltos de rodaje.
La portería del Mallorca ha empeorado mucho respecto al curso pasado. Es cierto que era muy complicado mantener el nivel con Greif como titular, Leo Román como suplente y Cuéllar como tercero. Se apostó por el ibicenco como titular y Pablo Ortellsdirector deportivo, renovó al veterano portero extremeño, que tiene 41 años, y fichó gratis al finlandés Lucas Bergström, de 23 años. Bajó el nivel porque la renovación de Román fue muy cara. El ibicenco pasó de ser uno de los peores pagados de la plantilla a uno de los escalones salariales más altos del vestuario. Algo lógico, pero que redujo el presupuesto para el segundo guardameta.
Ahora llega el problema para Jagoba Arrasate. No está disponible el ibicenco y tiene que elegir para el encuentro contra el Betis entre dos opciones que llevan dos años sin prácticamente minutos. La última temporada que Lucas Bergström tuvo continuidad fue en la 22/23 con el Peterborough United en la League One (tercera categoría inglesa) con 21 titularidades. En los siguientes dos años solo sumó diez choques en competiciones de clubes entre su cesión al Brommapojkarna sueco y en el Chelsea Sub-21. Aunque eso sí, jugó 15 encuentros con Finlandia Sub-21, incluido el último Europeo Sub-21 en Eslovaquia donde Ortells lo vio en directo.
La duda está en quién sustituirá a Leo Román porque este balance parece insuficiente para el segundo portero de un equipo como el Mallorcaya que no cuenta apenas con experiencia en el fútbol profesional. Por eso, la otra opción que baraja Arrasate es Pichu Cuéllar, que no juega un partido oficial desde el 26 de mayo de 2024 en el último partido de Javier Aguirre como entrenador bermellón. De hecho, esta es su tercera campaña en el Mallorca y solo ha disputado dos encuentros. La temporada pasada, ya con Arrasate a los mandos del banquillo, no contó con minutos en ningún choque. Lo que sí le avala es que cuenta a sus espaldas con 205 encuentros en Primera División y 199 en Segunda.
Arrasate tiene un problema porque ninguna opción convence lo suficientepero debe elegir a uno en Sevilla.








