Los New York Knicks jugaron cerca de un partido perfecto el viernes por la noche, justo a tiempo para prepararse para el equipo que les impidió un comienzo perfecto en casa.
Los Knicks buscarán vengar su única derrota en casa de la temporada el domingo por la tarde cuando reciban al Orlando Magic.
Ambos equipos tuvieron descanso el sábado después de obtener victorias en casa el viernes por la noche.
Los Knicks realizaron una racha histórica en el primer partido y derrotaron 146-112 al Utah Jazz.
El Magic, a su vez, le dio la bienvenida a Paolo Banchero, quien ayudó a Orlando a evitar una furiosa remontada del Miami Heat en el último cuarto para obtener una victoria por 106-105.
Los Knicks tienen marca de 12-1 en casa, el mejor comienzo para el equipo desde que la edición 1992-93 abrió 13-1. Sólo el campeón defensor de la NBA, Oklahoma City Thunder (11-0), está mejor en su cancha esta temporada.
Los Knicks han estado perdiendo sólo 23 segundos en sus últimas tres victorias en casa y lideraron de principio a fin en las últimas dos victorias. Nueva York venció a los Charlotte Hornets por 119-104 el miércoles por la noche.
Pero mientras los Hornets mantuvieron las cosas interesantes al acercarse a ocho puntos en el último cuarto, los Knicks dominaron al Jazz desde el inicio del viernes. Nueva York logró una ventaja de 23-0, su mayor racha para iniciar un juego desde que la NBA comenzó a rastrear datos jugada por jugada en 1996-97.
Los Knicks lideraron por al menos 19 puntos el resto del camino en su camino a acumular su mayor cantidad de puntos en un juego decidido en el tiempo reglamentario desde el 11 de noviembre de 1980, cuando Nueva York venció a los Detroit Pistons 149-118.
“Pensé que todos nuestros elementos básicos ofensivos eran buenos, mientras intentábamos hacer lo que necesitábamos a la defensiva”, dijo el entrenador en jefe de los Knicks, Mike Brown. “En conjunto, es una buena victoria para nosotros”.
Los Knicks han ganado cinco partidos seguidos en casa desde su única derrota en el Madison Square Garden el 12 de noviembre, cuando el Magic registró una victoria por 124-107.
Ese partido también pudo haber servido como un momento crucial en la temporada para Orlando, que logró la victoria a pesar de perder a Banchero por una distensión en la ingle izquierda a principios del segundo cuarto.
Banchero se perdió los siguientes 10 juegos, durante los cuales el Magic tuvo marca de 7-3 con victorias sobre los Detroit Pistons y los Knicks, quienes ingresaron el sábado como los dos mejores equipos de la Conferencia Este. Orlando promedió 122,3 puntos por partido sin Banchero después de terminar 6-6 y promedió 116,6 puntos por partido en sus primeros 12 partidos.
“Establecimos cómo queremos jugar como unidad”, dijo el delantero del Magic, Franz Wagner, después de anotar 32 puntos, el máximo del partido, el viernes por la noche. “Creo que si todos se comprometen con eso, la pelota encontrará a quien debe encontrar. Obviamente, muchas veces también será Paolo”.
Banchero fue titular el viernes, cuando sumó nueve puntos y seis rebotes en poco más de 20 minutos.
“Tan pronto como Paolo tenga un par de partidos en su haber, estaremos muy bien como equipo”, dijo Wagner.
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