Aproximadamente 27.000 mujeres son diagnosticadas con cáncer de mama cada año en Türkiye, y una de cada 18 mujeres corre el riesgo de desarrollar la enfermedad durante su vida.
Según información del Ministerio de Salud con motivo del Mes de Concientización sobre el Cáncer de Mama, del 1 al 31 de octubre, el cáncer de mama es el tipo de cáncer más común entre las mujeres tanto a nivel mundial como en Turquía, y sigue siendo un importante problema de salud pública.
El cáncer generalmente comienza en las glándulas productoras de leche (lóbulos) o en los conductos que transportan la leche (conductos) en la mama y, con menos frecuencia, puede desarrollarse en el tejido adiposo o conectivo de la mama.
Según datos de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente 2,3 millones de mujeres son diagnosticadas con cáncer de mama cada año en todo el mundo. Esta enfermedad representa el 23,8% de todos los nuevos diagnósticos de cáncer en mujeres, lo que la convierte en el cáncer más frecuentemente diagnosticado entre las mujeres. La elevada tasa lo convierte en un importante problema de salud pública que debe abordarse eficazmente mediante la detección temprana y la sensibilización.
En las primeras etapas, el cáncer de mama a menudo no muestra ningún síntoma, lo que hace que los programas de detección sean cruciales. El síntoma más común del cáncer de mama es un bulto indoloro en la mama que crece con el tiempo y se puede sentir al tocarlo.
Otras señales de advertencia pueden incluir cambios en la forma o el tamaño del seno, una textura de la piel de “piel de naranja”, secreción sanguinolenta del pezón, retracción del pezón o de la piel, enrojecimiento o engrosamiento del seno, hendidura hacia adentro, formación de costras o hinchazón y bultos en la axila o alrededor de la clavícula. Si alguno de estos síntomas está presente, es fundamental buscar atención médica de inmediato.
El cáncer de mama también puede surgir de una combinación de predisposición genética y factores ambientales.
Los factores de riesgo del cáncer de mama incluyen fumar y consumir productos de tabaco, no tener hijos o dar a luz tarde; no amamantar, usar terapia de reemplazo hormonal (TRH) durante más de dos años después de la menopausia, llevar un estilo de vida sedentario, tener sobrepeso u obesidad, consumir alcohol, tener tejido mamario denso, menstruación temprana y menopausia tardía, portar genes específicos como BRCA1 y BRCA2, o haber recibido radioterapia en la zona del pecho.
La mayoría de estos factores de riesgo se pueden reducir adoptando hábitos de vida saludables. En particular, la actividad física regular, una nutrición equilibrada, evitar el tabaco y el alcohol, mantener un peso ideal y controlar el estrés pueden ayudar a reducir el riesgo de cáncer de mama.
La estrategia más eficaz para combatir el cáncer de mama es la detección temprana.
Cuando se detecta a tiempo, los resultados del tratamiento son mucho más favorables, lo que hace que el diagnóstico temprano sea una medida que salva vidas. El Ministerio de Salud tiene como objetivo aumentar la conciencia sobre el cáncer de mama y mejorar las tasas de diagnóstico temprano a través de programas de detección del cáncer a nivel nacional.
Según datos nacionales sobre el cáncer, el 42,9% de los cánceres de mama recién diagnosticados están localizados, lo que significa que están confinados a la mama, mientras que el 12,5% ya se han extendido a órganos distantes. Esto subraya la importancia crítica de la detección temprana y los exámenes periódicos.
En Türkiye, en el marco del Programa Nacional de Control del Cáncer, se realizan exámenes de detección del cáncer gratuitos en los centros de atención primaria de salud a través de los Centros de Salud Comunitarios (TSM), los Centros de Vida Saludable (SHM), las Unidades de Diagnóstico Temprano del Cáncer, los Centros de Detección y Capacitación (KETEM), los Centros de Salud Familiar (ASM) y las Unidades Móviles de Detección del Cáncer.
Según los estándares nacionales de detección del cáncer de mama, se recomienda a las mujeres que se realicen autoexámenes de mama mensuales a partir de los 20 años, las mujeres de 20 a 39 años deben realizarse un examen clínico de mama cada dos años y las mujeres de 40 a 69 años deben realizarse un examen clínico de mama anual y una mamografía cada dos años.
El cáncer de mama puede presentarse de forma diferente en cada paciente. Por lo tanto, el plan de tratamiento se adapta individualmente según la edad del paciente, el estadio del cáncer, las características genéticas y el estado de salud general.
Los principales métodos de tratamiento incluyen cirugía, quimioterapia (terapia con medicamentos), radioterapia (radiación), terapias hormonales y terapias dirigidas e inmunoterapias. En los casos diagnosticados tempranamente, la tasa de supervivencia puede alcanzar hasta el 90%.