La temporada 2025-2026 de la Süper Lig apenas ha llegado a su octava semana, pero la liga ya está envuelta en una turbulencia administrativa sin precedentes.
Siete clubes se han separado de sus entrenadores, lo que pone de relieve la intensa presión y la poca tolerancia al bajo rendimiento en el fútbol turco.
A medida que los equipos entran en el parón internacional, la reestructuración del inicio de la temporada ha marcado un tono dramático para lo que promete ser una de las campañas más impredecibles de los últimos tiempos.
El Gaziantep FK fue el primero en actuar.
Después de sufrir derrotas consecutivas por 3-0 ante Galatasaray y Konyaspor en las dos primeras semanas, el mandato de İsmet Taşdemir terminó abruptamente.
Burak Yılmaz entró como su sustituto, estabilizando al club con cuatro victorias y dos empates en seis partidos, demostrando el impacto inmediato que puede tener un cambio de entrenador en la Süper Lig.
Pronto siguieron los tres grandes de Estambul.
Beşiktaş se separó de Ole Gunnar Solskjaer después de eliminaciones tempranas en competiciones europeas, incluida una derrota ante el Shakhtar Donetsk en la UEFA Europa League y la eliminación por Lausana en los play-offs de la UEFA Conference League.
Sergen Yalçın fue designado para reactivar la temporada del equipo blanquinegro.
Mientras tanto, José Mourinho, del Fenerbahçe, también se marchó después de un comienzo desigual: mientras que el técnico portugués eliminó al Feyenoord en la tercera ronda de clasificación de la Liga de Campeones, una posterior derrota en el play-off ante el Benfica, combinada con sólo una victoria en la liga y un empate, selló su destino.
Domenico Tedesco asume ahora el control del estadio Şükrü Saracoğlu.
Başakşehir, históricamente conocido por su estabilidad gerencial, se unió al éxodo.
Después de una decepcionante derrota en el play-off de la Conference League ante el Craiova rumano y dos empates en la liga, el club se separó del Çağdaş Atan y recurrió al ex entrenador del Borussia Dortmund, Nuri Şahin, para estabilizar el barco.
La purga directiva se extendió más allá de Estambul.
Eyüpspor, Kayserispor y Antalyaspor hicieron cambios a principios de temporada.
El Eyüpspor despidió al Selçuk Şahin tras sólo una victoria, dos empates y cinco derrotas, dejándolos con sólo cinco puntos en ocho partidos.
Markus Gisdol, del Kayserispor, dimitió tras conseguir cinco empates y tres derrotas, anotando sólo cinco goles y encajando 17.
Emre Belöğlu, del Antalyaspor, dimitió tras tres victorias, un empate y cuatro derrotas, incluida una aplastante derrota por 5-2 ante el Rizespor, lo que pone de relieve el complicado comienzo del club.
La avalancha de cambios directivos subraya lo mucho que está en juego en el fútbol turco, donde los resultados de principios de temporada a menudo dictan decisiones drásticas.
Con la liga en pausa por el parón internacional, los clubes esperan que un nuevo liderazgo pueda estabilizar el desempeño y guiar a sus equipos de regreso a la forma competitiva.