Caminar en medio del marcon el agua abriéndose a ambos lados, parece una escena de película bíblica. Pero en Maragogi, en el nordeste de Brasil, esa experiencia se convierte en realidad gracias al llamado Camino de Moisés.
Este fenómeno natural, que se forma cuando baja la marea, consiste en un banco de arena de aproximadamente un kilómetro de extensión que emerge entre aguas verde esmeralda y turquesas. Ubicado en la Praia de Barra Grande, a seis kilómetros al norte del centro de Maragogi, el lugar es conocido como el “Caribe brasileño“ por la belleza de sus playas y la transparencia del mar.
El nombre no es casual: quienes lo recorren sienten la sensación de caminar por un sendero seco en pleno océano, como en el relato bíblico de Moisés dividiendo el Mar Rojo. Sin embargo, este espectáculo tiene una condición clave: solo aparece en marea baja.
Por eso, planificar la visita es fundamental. Muchos turistas llegan en excursiones combinadas con las famosas piscinas naturales de Maragogi y se topan con el camino ya cubierto de agua. Los catamaranes, más lentos, suelen ser los que más frustraciones generan; incluso en lanchas rápidas el tiempo puede jugar en contra.
Clota Díaz Ordoñez y Ezequiel Favero, argentinos que viven en Brasil y comparten sus experiencias en @vivoportodegalinhas, advierten: si tu objetivo es recorrer el Camino de Moisés, lo ideal es dedicarle un día entero y llegar por tierra, ya sea en auto, van o aplicaciones locales de transporte. La mejor parte: el acceso es gratuito.
Además, recomiendan guiarse por las tablas de mareas. El momento perfecto se da cuando el nivel se acerca a 0.0; con 0.1 o 0.2 aún se disfruta sin problemas, pero con 0.3 el agua ya alcanza los tobillos.
Mucho más que un sendero en el mar
La experiencia no termina en el camino. Con la marea baja, la playa se convierte en un espacio vibrante con mesas, sombrillas, hamacas para fotos, bebidas y los clásicos brochetas (pinchos). Es un lugar ideal para pasar el día completo, ya que la marea tarda alrededor de seis horas en volver a subir.
Maragogi, con su Camino de Moisés, ofrece un destino que combina magia, naturaleza y aventura. Para no perderte este espectáculo único, la clave es clara: planificá tu visita en función de la marea. Solo así vas a poder caminar sobre el mar y vivir un recuerdo inolvidable.
