El uso no controlado de las redes sociales y los juegos digitales violentos representa una amenaza creciente para los niños durante la adolescencia, una de las etapas más importantes del desarrollo humano, dicen los expertos.
Los científicos han identificado un vínculo directo entre el mal uso de la tecnología y el comportamiento agresivo en las personas. La investigación indica que las tendencias violentas en los adolescentes no emergen únicamente de rasgos personales; Más bien, pueden resultar de la influencia combinada de los factores ambientales y digitales.
El profesor Dr. Eyüp Sabri Ercan, miembro de la facultad del Departamento de Salud y Enfermedades de la Salud Infantil y Adolescente de la Facultad de Medicina de la Universidad de EGE, señaló que los comportamientos violentos causados por el mal uso de la tecnología han aumentado notablemente en los últimos años.
“Los factores genéticos siguen siendo constantes, por lo que el aumento de los incidentes agresivos visibles apunta a la creciente influencia de los factores ambientales”, dijo Ercan. “Uno de los factores clave es el fuerte aumento en la exposición a los medios, las estructuras digitales y los juegos violentos. La interacción intensiva con las redes sociales y el contenido digital puede conducir a la agresión y la evitación de la comunicación social”.
Ercan enfatizó que los padres deben abordar posibles problemas de salud mental temprano. “Algunas familias descartan estos comportamientos como estados de ánimo adolescentes típicos. Sin embargo, las restricciones electrónicas son esenciales para los niños. Los padres también deben establecer límites para sí mismos. Muchos niños informan que se frustran con ver a sus padres constantemente mirando las pantallas. Los niños deben mantenerse alejados de series, películas y juegos violentos, y deberían participar en actividades deportivas regulares. Limitar el uso de los medios dentro de la familia es crítico”.
El Dr. Fevzi Tuna Ocakoğlu, también del Departamento de Salud y Enfermedades de la Universidad de la Universidad de EGE, explicó que los niños están expuestos a imágenes violentas, incluidas peleas, guerras y otras formas de contenido gráfico, en las redes sociales desde edades muy tempranas. Esta exposición, dijo, puede dificultar que los niños controlen la ira y las emociones.
“Los juegos de guerra digitales violentos y los juegos de rol, donde los niños adoptan personajes y cometen crímenes en el juego, los desensibilizan a la violencia. Esta desensibilización acelera las respuestas agresivas en situaciones de la vida real. Jugar con juegos altamente realistas también puede distorsionar la percepción de la realidad de un niño, lo que les da a actuar los comportamientos de la vida cotidiana en su vida cotidiana”.
Ambos expertos enfatizaron que los padres deben tomar medidas preventivas antes de encontrar problemas de comportamiento. Deben monitorear cuidadosamente qué plataformas digitales están utilizando sus hijos y estar alerta a los primeros signos de angustia psicológica. Estos pueden incluir el uso excesivo de la computadora, el retiro de las interacciones sociales, la inquietud, la ansiedad, las alteraciones del sueño y los cambios en el apetito.
Ocakoğlu destacó que el diagnóstico y la intervención tempranos son clave. “Al reconocer estos síntomas con prontitud, las familias pueden intervenir antes de que aumenten los problemas de salud mental. Esto ayuda a los niños a recuperarse y mantener su bienestar general”, dijo.