En medio de la incertidumbre económica y las tensiones internas en la oposición, Mauricio Macri volvió a mostrarse en público. El expresidente encabezó una reunión a puertas cerradas en la sede del PRO en la calle Balcarce, donde reunió a los candidatos que competirán en las elecciones de octubre.
Se trató de su primer movimiento político tras la derrota en la provincia de Buenos Aires y en un contexto en el que dirigentes como Cristian Ritondo y Silvia Lospennato ya no ocultan diferencias ideológicas con el oficialismo de Javier Milei.
Mensaje de prudencia y respaldo a los candidatos
“Es un momento para ser muy prudentes. Nunca fui de los que creyeron que ‘cuanto peor, mejor’”, sostuvo Macri antes de ingresar al encuentro.
El secretario general del PRO, Fernando de Andreis, destacó tras la reunión: “Charlamos de la realidad de cada provincia y ahora nos preparamos para la campaña. El PRO siempre está para colaborar”.
El vínculo con Milei
Consultado sobre la relación con el presidente, Macri reconoció: “Hace más de un año que no hablamos ni lo veo, pero yo siempre a disposición de ayudar a que este país encuentre el rumbo”.
También se refirió al respaldo de Estados Unidos a la gestión libertaria: “El apoyo que le ha dado el gobierno americano ayer ha sido muy impresionante, es una tranquilidad para poder trabajar y empezar una nueva etapa”.
Un PRO con presencia federal
El encuentro contó con la participación de candidatos de todo el país: Diego Santilli y María Florencia de Sensi (Buenos Aires), Fernando de Andreis (CABA), Carlos Hernández (Corrientes), Adriana García (La Pampa), Gisella Talquenca (Mendoza), Melina Valiente (Misiones), entre otros.
“El PRO tiene candidatos en todo el país que combinan juventud, energía y experiencia en gestión”, destacaron desde el partido en un comunicado difundido en redes sociales.
