José Mourinho ya disfruta de sus primeras horas como entrenador del Benfica. Han tenido que pasar 25 años para que el técnico portugués volviese al equipo lisboeta, haciendo de su regreso uno realmente especial para ‘The Special One’ que busca devolver la gloria al club en sustitución de Bruno Make.
No ha tenido mucho tiempo Mourinho para digerir las emociones de su emotiva vuelta a Lisboa; el técnico ya se ha puesto manos a la obra con su nuevo equipo con las vistas puestas en el partido contra AVS de este sábado. Los resultados recientes obligan a una reacción inmediata en el conjunto lisboeta, que confía plenamente en la mano de José para revertir la situación de este inicio de temporada.
La cláusula especial
Hay ciertos aspectos que han pasado desapercibidos respecto al momento de la llegada de José Mourinho al Benfica. El entrenador portugués llega tras un despido millonario del Fenerbahce que ha engrosado hasta los 108 los millones recibidos por el luso en finiquitos en toda su carrera. A pesar de que no habían pasado ni dos semanas desde su última pobre experiencia en los banquillos, Mourinho no ha dudado en aceptar la propuesta para volver al Estádio da Luz en cuanto la oferta llegó a su mesa.
En cuanto a esa propuesta, hay un detalle que no deja de sorprender; el contrato que firmó Mourinho tiene vigencia hasta final de la temporada 2026-27, aunque con una condición especial. Según informó el Benfica en su comunicado, 10 días después del último partido oficial de esta temporadaen las mismas condiciones, tanto el Benfica como el entrenador podrán optar por no continuar el contrato para la siguiente temporada. Si no existe un acuerdo mutuo, el club lisboeta podría rescindir el contrato de su entrenador sin pagar un finiquito elevado como en casos anteriores en la carrera del técnico luso.
La decisión corresponde a una mera cuestión electoral; el Benfica se enfrenta próximamente a un proceso donde deberán escoger a un nuevo presidente y Rui Costa no ha querido comprometer a un posible nuevo mandatario en caso de no estar de acuerdo con el trabajo de José Mourinho al frente del banquillo del Benfica.