Papa Leo XIV expresó una profunda preocupación por la crisis humanitaria en curso en Gazacriticar la falta de medidas efectivas para aliviar el sufrimiento de los civiles a pesar de la presión sobre Israel desde Estados Unidos.
“A pesar de que ha habido cierta presión sobre Israel de los Estados Unidos, y a pesar de algunas declaraciones muy claras del presidente Trump, no ha habido una respuesta clara en términos de encontrar formas efectivas de aliviar el sufrimiento de las personas, las personas inocentes en Gaza, y eso es obviamente una gran preocupación”, dijo el Papa en una entrevista con Penguin Perú publicada el jueves.
El Papa destacó las necesidades urgentes de los gazanes, particularmente los niños, enfatizando el requisito de asistencia médica y ayuda humanitaria para abordar la situación “muy grave”.
“Es tan horrible ver las imágenes que vemos en la televisión, con suerte, algo cambia esto”, dijo.
El Papa Leo también advirtió contra el creciente entumecimiento de la crisis. “Esa es una especie de respuesta humana, porque solo puedes soportar mucho dolor”, agregó.
Sobre si la situación de Gaza podría ser etiquetada como “genocidio”, el Papa declaró que la Santa Sede no puede hacer una declaración oficial en este momento. “Hay una definición muy técnica sobre qué podría ser el genocidio, pero cada vez más personas están planteando el problema, incluidos dos grupos de derechos humanos en Israel han hecho esa declaración”, explicó.
La Comisión de Investigación Internacional Independiente de la ONU sobre el territorio palestino ocupado concluyó el martes que las fuerzas israelíes cometieron “cuatro de los cinco” actos genocidas definidos bajo la Convención de Genocidio de 1948: matar a los miembros de un grupo, causarles daños corporales y mentales graves, infligir deliberadamente las condiciones de vida calculadas para destruir el grupo y prevenir los nacimientos.
La entrevista también tocó la política estadounidense, con el Papa Leo enfatizando que su formación estadounidense le permite comprender mejor el contexto del país, aunque aclaró que no planea participar en una política partidista.
Más tarde reconoció que “Estados Unidos es un jugador de poder en el nivel mundial” y dijo: “Tenemos que reconocer que, y a veces las decisiones se toman más basadas en la economía que en la dignidad humana y el apoyo humano, pero (tenemos que) seguir desafiando y plantear algunas preguntas para determinar la mejor manera de responder”.